Estudios recientes han demostrado que las personas migrantes y las minorías étnicas pueden tener mayor riesgo de comportamiento suicida en comparación con la población general, así como de muerte por suicidio.
Las alteraciones del sueño son una de las quejas más persistentes de las personas migrantes, sobre todo, en relación con el insomnio de conciliación, asociado a preocupaciones recurrentes en el contexto del duelo migratorio.
Psiquiatra. Coordinadora del programa ESMES (Equip Salut Mental Sense Sostre) y programa SATMI (Programa d'atenció en Salut Mental per població immigrada)