Psicosis y maternidad: superando los desafíos de la adolescencia

Entre el 50 y el 60 % de las mujeres con psicosis son madres, un porcentaje similar a la población general. Muchas de ellas asumen el cuidado de sus hijos e hijas, a pesar de las dificultades que les pueda generar el trastorno, las barreras sociales o la falta de comunicación de estas problemáticas con su entorno. Además, el miedo al estigma, la falta de sensibilización de los profesionales respecto a la maternidad y el miedo a la pérdida de custodia dificultan mucho que puedan hablar y que pidan ayuda. Como resultado, las mujeres que son madres y tienen algún trastorno psicótico acostumbran a tener algunas necesidades en la crianza. Y todo ello afecta en su pronóstico y en la relación con sus hijos e hijas.  

Se estima que más del 70% de los niños que viven con un progenitor con problemas de salud mental experimentarán sintomatología, especialmente durante la adolescencia. Estos adolescentes necesitan información sobre el trastorno de su madre, así como recibir acompañamiento. Sin embargo, muchas veces el trastorno se trata como un secreto o un tabú, con la intención de protegerlos o por miedo a asustarles. Es frecuente que los adolescentes no entiendan ciertas situaciones, se sientan confundidos, con muchas preguntas sin resolver y preocupaciones sobre su propio futuro. Muchos viven hipervigilantes ante cualquier posible síntoma que puedan tener ellos. También se ha visto que a menudo asumen responsabilidades de adultos. Por este motivo, numerosos estudios han enfatizado la importancia de la psicoeducación y de promover estrategias de afrontamiento para evitar la soledad y fomentar la resiliencia en la adolescencia.  

Muchos adolescentes se sienten confundidos ante el trastorno psicótico de su progenitor y con temor a desarrollar alguno de los síntomas. 

A pesar de lo imprescindible que es poder contar con una intervención psicológica grupal dirigida a estas madres y a sus hijos e hijas, actualmente no existe ninguna terapia en esta línea a nivel mundial. Este tipo de intervención no solo tendría el potencial de aliviar los síntomas de las madres, sino también mejorar el ambiente familiar y reducir el riesgo de problemas emocionales en los hijos.  

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Beneficios del entrenamiento metacognitivo familiar  

El entrenamiento metacognitivo (EMC) es una intervención psicológica validada en población con psicosis. Tiene como objetivo aprender a reflexionar sobre nuestros pensamientos, con una doble finalidad: observar nuestros procesos cognitivos y ser conscientes de los errores de la mente, así como ser capaces de detectarlos y controlarlo. 

El EMC presenta varias ventajas para familias en las que la madre tiene un diagnóstico de psicosis y para sus hijos:  

• Mejora en la comprensión mutua y en la relación madre-hijo. Puede ayudar a las madres a reflexionar sobre sus pensamientos y a entender las perspectivas de los demás. Es importante reconocer y responder bien a las necesidades emocionales y sociales de sus hijos, lo que les permite conectarse mejor y tener un ambiente familiar más saludable.
• Reducción de síntomas psicóticos y del estrés asociado. El EMC se ha asociado con una reducción de los síntomas de la psicosis, como los delirios, lo cual disminuye el estrés en la madre y en la familia en general, mejorando la estabilidad familiar y reduciendo las probabilidades de hospitalización.
• Fortalecimiento de la autorreflexión y el "cerebro social" en adolescentes. La adolescencia es un momento crítico para la maduración de las capacidades cognitivas de autorreflexión sobre uno mismo y sobre las otras personas, y, además, es un periodo crítico para el desarrollo de la esquizofrenia. Para los hijos e hijas adolescentes, la cognición social, la capacidad de leer y entender las emociones de los demás y de atribuir intenciones es vital para desarrollar relaciones saludables. Participar en un programa que refuerce estas habilidades puede ayudarles a comprender mejor el estado de su madre y a gestionar sus propias relaciones de una forma positiva.
• Eficacia especialmente en mujeres: La investigación reciente sugiere que el EMC es particularmente eficaz en mujeres, lo que lo convierte en una intervención ideal para madres con psicosis.

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Adaptando el entrenamiento metacognitivo familiar a madres con psicosis y a sus hijos adolescentes  

Aunque el entrenamiento metacognitivo (EMC) ha mostrado beneficios para personas con psicosis, su aplicación en el ámbito familiar aún no ha sido explorada. Sobre la base de esta necesidad, el proyecto “Entrenamiento Metacognitivo Familiar (EMC-F) online en madres con psicosis y sus hijos/as adolescentes”, liderado por el Parc Sanitari Sant Joan de Déu y financiado por el Insitituto de Salud Carlos III, con el apoyo de la Fundación Naccari Ravà y el programa Investigo (NextGenerationEU), tiene como objetivo adaptar y evaluar la eficacia del EMC en un contexto familiar.  

Esta adaptación no solo ha contado con la participación de personal clínico e investigador, sino también con la participación directa de mujeres con psicosis, familiares y adolescentes, que han revisado el material y han propuesto cambios y sugerencias. Como consecuencia, contamos con una intervención personalizada, con un lenguaje que se adapta a las participantes y a sus hijos e hijas, que incluye situaciones y preocupaciones cotidianas. Además, se ha diseñado para ser interactivo y entretenido, con el fin de aumentar así la motivación de las familias participantes.

El entrenamiento metacognitivo familiar se presenta como una herramienta psicológica prometedora para apoyar a madres con psicosis y a sus hijos adolescentes

Se trata de un entrenamiento de once sesiones grupales semanales, en las que los grupos se organizan según la edad de los adolescentes. El formato grupal facilita la detección de las distorsiones cognitivas (errores de pensamiento), poder comprender a los demás y ponerse en su lugar y la reducción del estigma. Algunos de los temas tratados en las sesiones incluyen:  

• El conocimiento del trastorno por parte de los adolescentes.
• La toma de decisiones precipitadas.
• El exceso de confianza en la memoria.
• La empatía.  
• El estigma en torno al trastorno.
• La prevención de recaídas.  

Además, se incluye una sesión en la que madres e hijos se separan, permitiendo que cada grupo exprese libremente sus preocupaciones y emociones.

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El entrenamiento metacognitivo familiar se presenta como una herramienta psicológica prometedora para apoyar a madres con psicosis y a sus hijos adolescentes. Esta intervención permite abordar de manera conjunta las distorsiones cognitivas —errores en el procesamiento del pensamiento— que tienden a intensificarse en los episodios psicóticos, exacerbando los síntomas y generando conflictos en las relaciones familiares y sociales. Asimismo, trabajar de manera preventiva estas distorsiones cognitivas en los adolescentes puede reducir el riesgo de desarrollar síntomas asociados con los trastornos psicóticos y fomentar una percepción de la realidad más equilibrada desde etapas tempranas de la vida.

¿Quieres participar en el programa?

Si quieres participar en el programa de entrenamiento metacognitivo familiar y ayudar a evaluar su efectividad, puedes llamar o escribir un WhatsApp al teléfono 673958196 o enviar un correo a lin.chen@sjd.es y te facilitaremos todas la información. Te ayudará a mejorar las relaciones familiares y te permitirá conocer a otras madres que están viviendo experiencias similares.