¿Los niños y niñas con autismo tienen más problemas de sueño?
Los niños y niñas con problemas de neurodesarrollo tienen una alta prevalencia de problemas de sueño, entre el 50-80% frente al 25-30% de los niños neurotípicos. Esta falta de calidad en el sueño se vincula también a un empeoramiento de la situación clínica de estos niños durante el día.
Es a partir de los 30 meses de vida cuando se empiezan a evidenciar que los niños y niñas con autismo duermen menos que el resto de niños neurotípicos y que tienen más despertares nocturnos. En este sentido, es importante prestar atención porque cuanto más corto sea el sueño mayores dificultades tendrán desde el punto de vista comunicativo. Sobre los motivos por los que esto sucede, se apunta a un origen multifactorial: biológico, médica (por ejemplo, la presencia de crisis epilépticas, de reflujo gastroesofágico, apneas, movimientos inquietos de piernas, etc.) y conductual. El trastorno más frecuente es el insomnio, pero también puede aparecer síndrome de apnea-hipopnea del sueño (SAHS), síndrome de piernas inquietas (SPI), movimientos periódicos de las piernas durante el sueño (MPP) o trastornos rítmicos del movimiento (TRM).