Los petardos pueden afectar significativamente a las personas con autismo debido a su alta sensibilidad a los estímulos sensoriales, convirtiendo algunas festividades o verbenas en una pesadilla para ellas.
Según indican algunos estudios clínicos, los antecedentes sociofamiliares de las personas con dependencia emocional podrían actuar como factores de vulnerabilidad, si han podido o pueden estar sufriendo maltrato emocional